Malas posturas y estrés: las reinas de la pandemia. Con el teletrabajo y las tareas del hogar, seguramente los dolores aumentaron, sobre todo aquellos que afectan a la columna y a la cintura. La buena noticia es que si cambiamos nuestros malos hábitos, fortalecemos abdominales y hacemos el tratamiento adecuado, podremos vencer el dolor y mejorar la calidad de vida.
Si estás todo el día teletrabajando o en la oficina frente a la computadora es probable que tengas ese dolor punzante en la región lumbar. Esta molestia suele tener origen muscular y ser una patología laboral. Las personas que usan la computadora muchas horas sin las sillas adecuadas y los cuidados ergonómicos que se deben tener, suelen sufrir dolor de cintura.
Las posiciones viciosas adoptadas en el transcurso del día, sobre todo si son largas horas de trabajo, sumadas al sedentarismo y a la falta de ejercicio, es probable que culminen en una contractura crónica. Las lumbalgias o dolores de cintura de origen muscular o biomecánico son las más comunes y se producen por la falta de tonicidad de toda la musculatura que rodea la columna, principalmente, los músculos abdominales y espinales, también por la poca elongación en los músculos de las piernas, sobre todo los que van por detrás, los isquiotibiales. Muchas personas tienen acortamiento de los mismos, lo que les provoca una mala posición de la región lumbar.
Las lumbalgias y las cervicalgias (dolor de cuello) son más frecuentes en las personas de edad media, aproximadamente entre los 30 y 50 años de edad es el mayor porcentaje.
Se da en todos los momentos de la vida pero en la etapa laboral activa es cuando más se manifiesta. Las personas que hacen esfuerzos excesivos con su columna lumbar están más predispuestos que otras que no los hacen. Por ejemplo, quienes deben cargar peso o al hacer tareas hogareñas en posturas inadecuadas.
Diagnóstico y tratamiento:
Ante la aparición del dolor, primero hay que descartar cualquier patología de origen orgánico. Para ello es necesario consultar al médico y hacerse radiografías o estudios como una resonancia magnética para ver los discos. Si a través del diagnóstico se descarta toda patología orgánica, significa que predomina fundamentalmente lo muscular o postural sobre el cuadro clínico. En esas condiciones el médico hará una evaluación en relación a la postural global muscular y se inicia un tratamiento.
En la patología orgánica, cuando el disco se altera, se produce la hernia que comprime los elementos nerviosos. En estos casos, si la persona no mejora con los tratamientos convencionales quizá tenga que hacerse una intervención quirúrgica.
MASAJES: MASOTERAPIA, EJERCICIOS POSTURALES, DE RELAJACIÓN Y ELONGACIÓN JUNTO A LA PRÁCTICA DE ACTIVIDAD FÍSICA SON LOS ALIADOS PARA ALIVIAR EL DOLOR DE CINTURA.
Las cuestiones posturales se resuelven con tratamientos fisiokinésicos y ejercicios, los cuales muchas veces son específicos para la columna como la reeducación postural global (RPG), una gimnasia muy importante que mejora muchísimo toda la situación muscular.
En esta técnica se utilizan posturas como la “rana al aire” o “postura de bailarina” para trabajar la gran cadena posterior del cuerpo y la “rana al piso” para trabajar la gran cadena anterior. Dichas posturas se combinan con una respiración específica que se utiliza junto con la puesta en tensión de las cadenas musculares, por medio de las posturas, que permiten flexibilizar el tórax abordando al paciente en forma global.
7 consejos para la prevención:
1. Parar ante el dolor: si se está lavando platos o cualquier otra tarea con una posición similar, y aparece un dolor en la cintura o espalda, hay que detenerse inmediatamente y buscar una posición donde ese dolor no aparezca. Continuar en la misma posición llevará a la persona a adoptar posiciones incorrectas para evitar el dolor, deformando la postura.
Con el teletrabajo seguramente los dolores aumentaron, sobre todo aquellos que afectan a la columna y a la cintura.
YOGA: ES EXCELENTE PARA LOS PROBLEMAS DE COLUMNA PORQUE RELAJA Y ENSEÑA A RESPIRAR BIEN.
2. Si aparecen dolores en la práctica de yoga: hay que escuchar al cuerpo y detenerse. No realizar movimientos que produzcan dolor; de no poder evitar el dolor en la práctica, es preciso abandonarla y consultar a un médico.
3. Aplicar la ergonomía: la altura de los monitores de computadoras debe estar de modo que los ojos estén por debajo del límite superior de la pantalla, preferentemente, apuntando al centro de la pantalla.
4. El mouse, en su lugar: debe estar colocado a una distancia similar a la del teclado, a un lado de este y no alejado para evitar el estiramiento innecesario del hombro y el desbalanceo de la columna.
Debe procurarse no desplazarlo más allá de los 20 cm si el puntero se mueve poco, entonces hay que hacer el mouse más sensible al movimiento.
5. Al realizar tareas que impliquen agacharse (hacer la cama, levantar objetos, etc.) y/o mantener esa postura un determinando tiempo debe procurarse realizarlas poniéndose en cuclillas y manteniendo la columna en posición correcta. Para levantar objetos pesados del suelo es recomendable flexionar las rodillas manteniendo la espalda recta, y realizar la fuerza con las piernas.
6. Los palos de escoba, escobillones u otra herramienta del hogar, deben ser largos, más largos de lo usual, para evitar estiramientos y encorvamientos innecesarios en la tarea.
Con el teletrabajo seguramente los dolores aumentaron, sobre todo aquellos que afectan a la columna y a la cintura.
7. Tener en cuenta el respaldo y la postura al trabajar: las sillas y asientos que se usan habitualmente (en tareas de oficina o el hogar) deben tener el respaldo a 90º y la persona debe sentarse llevando la cola bien atrás y apoyar la espalda en el respaldo. No son convenientes los respaldos curvos. Esta recomendación es válida también para el asiento de los automóviles. Por último, no colocar el teléfono entre la oreja y el hombro. Es la mejor postura para sentir dolor y contracturarse. ¡A optar por hábitos saludables!.
Lo que no hay que hacer:
Evitar los movimientos que exijan doblar al máximo la columna, tanto hacia adelante como hacia atrás.
No hacer grandes esfuerzos o giros bruscos de la columna.
Evitar movimientos de alto impacto.
No levantar peso excesivo.
Evitar el exceso de ejercicio.
Si bien se usan miorrelajantes (relajan los músculos) y antiinflamatorios para calmar el dolor, estos medicamentos se deben tomar con mucha precaución, ya que su abuso puede producir hemorragias gástricas. Se deben tomar bajo supervisión médica y jamás hay que automedicarse.
Con el teletrabajo seguramente los dolores aumentaron, sobre todo aquellos que afectan a la columna y a la cintura.
Cuándo ir al médico:
Es importante concurrir a la consulta si…
• El dolor baja por la pierna hasta más abajo de la rodilla.
• Si la persona siente la pierna, pie, ingle o el área rectal adormecida.
• Si tiene fiebre, náuseas, vómitos, dolor de estómago, debilidad o sudoración.
• Si pierde el control para ir al baño.
• El dolor fue por causa de una lesión.
• El dolor es tan intenso que la persona no puede moverse, o no parece mejorar después de dos o tres semanas.
Fuente: mia.perfil