No solamente importa la cantidad de tiempo que pasamos durmiendo, también es importante la calidad del sueño. Cuando el sueño es interrumpido o acortado, puede que no hayamos pasado suficiente tiempo en determinadas etapas del sueño. En otras palabras, lo bien que hayas descansado y lo bien que funciones al día siguiente dependerá del tiempo total que hayas dormido y cuanto de las diferentes etapas del sueño has tenido.
Necesitamos dormir para pensar claramente, reaccionar rápido y asentar nuestra memoria. De hecho los procesos del cerebro que nos ayudan a aprender y recordar son especialmente activos mientras dormimos.
Escatimar sueño tiene un precio. Restar tan solo una hora de sueño puede hacer que sea difícil concentrarse al día siguiente y enlentecer tu tiempo de respuesta. Los estudios también indican que la falta de sueño hace que tomemos malas decisiones y asumamos riesgos innecesarios. Esto puede dar lugar a bajo rendimiento en el trabajo o la escuela y mayor riesgo de sufrir accidentes de tráfico.
El sueño también afecta al estado de ánimo. Si no dormimos suficiente estaremos más irritables y eso afectará a nuestro comportamiento y relaciones. La gente con falta crónica de sueño tiene más probabilidades de tener depresión.
Dormir es importante para una buena salud. Los estudios demuestran que no dormir suficiente o tener una mala calidad de sueño, incrementa el riesgo de hipertensión, enfermedad cardíaca y otras enfermedades.
Además, durante el sueño, nuestro cuerpo produce determinadas hormonas; por ejemplo, dormir profundamente desencadena mayor liberación de hormona de crecimiento. Otros tipos de hormonas se liberan durante el sueño para ayudar a combatir las infecciones. Por eso dormir bien ayuda a evitar enfermedades y mantenerte sano.
También se liberan durante el sueño hormonas que afectan al uso que el cuerpo hace de la energía. Así la gente que duerme menos es más propensa a ser obesa, desarrollar diabetes o preferir alimentos muy calóricos y ricos en carbohidratos.
¿Qué debemos hacer para descansar bien?
Al igual que alimentarse bien y estar físicamente activos, dormir bien es fundamental para tu bienestar. A continuación te proponemos varios consejos para descansar bien:
• Como medida principal se recomienda dormir un mínimo de ocho horas diarias, debido a que no dormir lo suficiente puede llevarte a un mal funcionamiento de la mente y a ciertos problemas de salud.
• Sigue un horario fijo para dormir: intenta acostarte y levantarte siempre a la misma hora. Así ayudarás a saber a tu cuerpo cuando es el momento de ir a descansar.
• Evita la cafeína y la nicotina: los efectos de los estimulantes pueden tardar hasta 8 horas en disiparse. También hay que evitar las bebidas alcohólicas ya que hacen que te mantengas en los estados más ligeros de sueño y que te despiertes cuando sus efectos sedantes se van disipando.
• Evita comer o beber demasiado por la noche: puede dar lugar una indigestión que interfiera con el sueño. Beber demasiado también hace que te despiertes para orinar.
• Relájate antes de ir a dormir: una actividad relajante antes de ir a dormir, como leer o escuchar música, debe formar parte de tu ritual antes de acostarte. También puedes tomar un baño caliente.
• Cuida el ambiente de tu dormitorio: elimina cualquier cosa que pueda distraerte como ruidos, luces, celular o TV.
• No tomes medicamentos que alteren o interrumpan el sueño. Evita tener cerca de la cama equipos que puedan emitir campos electromagnéticos.
• Exponte a la luz solar: la luz del sol es fundamental para regular los patrones de sueño. Intenta salir a la luz solar al menos 30 minutos al día.
• No estés despierto en la cama: si continúas despierto después de estar más de 20 minutos en la cama, levántate y haz alguna actividad relajante hasta que te sientas soñoliento.
Fuente: www.vivosano.org