Continuamos con el décimo principio de la serie.
Hoy: Deber de Guardar Secreto
Este principio se refiere concretamente a que cualquier empleado debe guardar secreto de la información a que tenga acceso y que se exija tal comportamiento de su parte. La información bajo secreto es aquella que no es conocida ni fácilmente accesible, que puede tener un valor operativo, comercial, o haya sido impartida con la condición de guardar estricta celosía de su contenido, fuente y consecuencias.
En nuestra actividad particular, la no difusión de datos o de determinada información que se posee, es fundamental para llegar al cumplimiento de nuestros objetivos: porque la seguridad de la información tiene como primer condición, precisamente, la no difusión a extraños y a terceros.