La actividad del ciclismo ha ido en aumento en los últimos años en todo el mundo por varios motivos, que pasan desde la elección de un modo de vida más activo y sano, pasando por la adhesión de más y más personas a un estilo de vida cercano al deporte, y hasta incluyendo a aquellos que han adoptado la bicicleta como medio de transporte alternativo para disminuir los gastos de movilidad en automóvil.
Por estos motivos, se ha multiplicado inmensamente la población de bicicletas que circulan por las calles de la ciudad y que invaden los parques los fines de semana, definiendo una actividad que sin duda irá en crecimiento en el futuro. Las hay de todo tipo, pequeñas y coloridas para los niños, hasta sofisticadas y especializadas para los deportistas más dedicados, llegando a alcanzar precios que compiten con el valor de algún automóvil.
“SE HA MULTIPLICADO LA CANTIDAD DE BICICLETAS EN LOS ULTIMOS TIEMPOS EN BUENOS AIRES, LLEGANDO A ALCANZAR ALGUNAS DE ELLAS VALORES MUY IMPORTANTES”.
Pero así como ha crecido el mundo de la bicicleta, también se ha incrementado en los últimos tiempos la cantidad de robos de las mismas. La falta de registros de bicicletas, la facilidad reducirlas en conjunto o por partes y la informalidad del mercado de compra venta, han convertido a este delito en uno de los más habituales en el mundo y en nuestro país.
En nuestra actividad de seguridad privada, prestamos servicios en muchos edificios en los cuales la cantidad de bicicletas se ha expandido últimamente, hasta el punto en que han comenzado a aparecer problemas en la guarda de las mismas, en las cocheras o lugares comunes, tanto sea por la falta de un sistema de estacionamiento adecuado como por la carencia de sistemas de seguridad antirrobo.
De tal forma, el hurto de bicicletas en los edificios se ha presentado como una nueva modalidad delictiva creciente que tenemos que reconocer y contrarrestar.
“EL HURTO DE BICICLETAS EN LOS EDIFICIOS SE PRESENTA COMO UNA MODALIDAD DELICTIVA CRECIENTE QUE TENEMOS QUE CONTRARRESTAR”.
SIE se encuentra en plena campaña de concientización de este tipo de actividad delictiva en todos los niveles. Con sus clientes, por un lado, proponiendo soluciones de infraestructura adecuadas para la guarda segura de las bicicletas en los servicios y la adopción de medidas de precaución al circular por la vía pública con las mismas. Por otro lado, desde el punto de vista operativo, generando nuevos procesos de control y alertando a todo su personal para que esté atento a toda aquella situación en la que esté involucrado el movimiento de bicicletas por los accesos a los edificios donde se prestan servicios.
Por ese motivo, recordamos a nuestros vigiladores que prestan servicios en lugares donde hay guarda y circulación de bicicletas, que tengan en cuenta lo siguiente:
1. Tomar nota, dentro de lo posible, de las bicicletas que están guardadas en la cochera de su edificio y a quien pertenecen (sobre todo las más valiosas).
2. Invitar a sus propietarios a que adopten un efectivo sistema de seguridad antirrobo.
3. Estar atento a toda situación que involucre la salida de bicicletas por los accesos a fin de intentar identificar posibles irregularidades.
“DEBEMOS ESTAR ATENTOS A LOS MOVIMIENTOS DE BICICLETAS POR LOS ACCESOS PARA IDENTIFICAR SITUACIONES IRREGULARES.”